Los imputados son Rocío y Gerardo Pazos, quienes al momento de producirse los hechos contaban con 21 y 23 años de edad. Ambos, desde entonces, se encuentran detenidos en Viedma. Se les responsabiliza por la figura de “Robo agravado en grado de tentativa, en concurso ideal con homicidio simple, que prevé una pena de entre 8 y 25 años de prisión.
El juicio será conducido por el tribunal de la Sala A de la Cámara del Crimen, compuesto por Susana Milicich, María del Carmen Vivas y Eduardo Jiménez.
El fiscal será Juan Ramón Peralta, mientras que la defensa será ejercida por Ariel Alice, quien durante el proceso de investigación presentó quejas ante el STJ por supuesta irregularidades, como en la extracción de huellas dactilares y allanamientos nocturnos.
No se descarta que el debate se lleve a cabo en esta localidad, donde residen la mayoría de los testigos.
Ulloga fue encontrado muerto por familiares en el interior de su vivienda ubicada en barrio Fonavi. Le habían tapado la boca con un trapo, y le ataron los pies y las manos con cordones. La autopsia reveló que también le habían dado un fuerte golpe en la cabeza con un hierro o barreta. Pero no fue esa la causa de la muerte, sino un colapso cardíaco.
Desde el comienzo la principal teoría fue la del robo. La víctima tenía una suma de dinero cercana a los 3.500 pesos que los investigadores encontraron posteriormente ocultos en la casa. Se sospecha que los hermanos sabían de la existencia de esa suma.
Uno de los detalles llamativos fue que no advirtieron puertas y ventanas violentadas. La chica había realizado con anterioridad trabajos domésticos en la vivienda. Por eso suponen que el anciano le permitió ingresar a su propiedad. Luego lo hizo el muchacho y habrían perpetrado el ataque.
Luis Uribe
El juicio será conducido por el tribunal de la Sala A de la Cámara del Crimen, compuesto por Susana Milicich, María del Carmen Vivas y Eduardo Jiménez.
El fiscal será Juan Ramón Peralta, mientras que la defensa será ejercida por Ariel Alice, quien durante el proceso de investigación presentó quejas ante el STJ por supuesta irregularidades, como en la extracción de huellas dactilares y allanamientos nocturnos.
No se descarta que el debate se lleve a cabo en esta localidad, donde residen la mayoría de los testigos.
Ulloga fue encontrado muerto por familiares en el interior de su vivienda ubicada en barrio Fonavi. Le habían tapado la boca con un trapo, y le ataron los pies y las manos con cordones. La autopsia reveló que también le habían dado un fuerte golpe en la cabeza con un hierro o barreta. Pero no fue esa la causa de la muerte, sino un colapso cardíaco.
Desde el comienzo la principal teoría fue la del robo. La víctima tenía una suma de dinero cercana a los 3.500 pesos que los investigadores encontraron posteriormente ocultos en la casa. Se sospecha que los hermanos sabían de la existencia de esa suma.
Uno de los detalles llamativos fue que no advirtieron puertas y ventanas violentadas. La chica había realizado con anterioridad trabajos domésticos en la vivienda. Por eso suponen que el anciano le permitió ingresar a su propiedad. Luego lo hizo el muchacho y habrían perpetrado el ataque.
Luis Uribe
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