Ex-empleados que hacen tortas fritas y pan casero para subsistir, dos Plantas quizá las más importantes y referentes en cuanto a la actividad pesquera cerradas, lancheros artesanales cuyas salidas a pescar han sido mínimas.
Por Marcel Oliva
Que enfermedad incurable tiene éste sector?, alguna vez tendrá solución, alivio al menos?, quienes son los responsables?.
La preguntas cuando el invierno arrecia sobre la ciudad como ocurre por éstos días cada vez son más, lo lamentable es que las soluciones para aquellos que sufren la falta de su fuente laboral, la inactividad del sector y la apatía de ciertos funcionarios las preguntas no existen, solo existen las realidades que están viviendo, eso es lo que tienen…
Así está San Antonio Oeste por éstos días y por los que viene seguramente no estará mucho mejor entonces cada vez que vienen los políticos a anunciar sus pre-candidaturas, cada vez que por los medios "amigos" nuestros dirigentes hablan con el repetido verso grabado en la Universidad de la Politiquería habría que pensar y detenerse un momento en la situación que están viviendo por éstos días más de 150 familias nuestras, vecinos nuestros que cada vez sienten él invierno presente más frío.
El hombre que trabaja en la pesca, el que se hace a la mar a buscar la materia prima, siente y convive de por sí con gélidas temperaturas en cualquier estación del año, pero es diferente si por su tarea obtiene el sustento para si y para los suyos, si puede volver a su casa "con frío" como cada día pero con la alegría interior que a sus hijos no les faltará lo mínimo indispensable.
Por éstos días en Europa es real la baja del precio de la materia prima o como aquí se conoce "el merluzón" (que es lo que se exporta) por cuanto el trabajo y el sacrificio de nuestros hombres "de la pesca con palangre" poco es lo que vale.
El frío duele, molesta, causa malestar general, no se vive de la misma manera en los sectores de la ciudad, pero existe un frío más triste y que causa mucha furia que hasta el momento sin saber por cuanto más será contenida, y es el frío de aquel que teniendo las herramientas para facilitar las soluciones deja que todo siga, desinteresadamente, apáticamente.
Hasta cuando seguirá esto así, hasta cuando la repetida historia del sector que debe ser el motor que impulsa la economía de la región, hasta cuando se soportará sin reacción... quién sabe, quizá los tiempos se acorten quizá ya no haya tanta paciencia, se mitigará la situación con el fuego de las cubiertas encendidas en "un piquete", con el calor de los cuerpos que se manifiesten con violencia?, seguramente no, pero mientras ésta oscura estación continúa su dolorosa marcha no se avisoran mejores tiempos en los días por venir…
Por Marcel Oliva
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